Menú
Subcategorías del catálogo

De Activo Zombi a Inmueble Estrella: Cómo Reposicionar, Retener o Vender en un Mercado que no se Detiene

0 comentarios

Hace quince o veinte años, muchos propietarios en #SantoDomingo, #SantiagoRD o #PuntaCana se sentían orgullosos de sus torres y plazas recién inauguradas. Eran #InmueblesComerciales modernos, con terminaciones de lujo, parqueos suficientes y clientes corporativos de primera línea. Eran, literalmente, la joya del mercado. Sin embargo, la historia cambió. Lo que en su momento fue Clase A hoy puede estar en la categoría B, o hasta C, y lo que alguna vez fue referencia de prestigio, diseño, ubicación y presencia, ahora corre el riesgo de convertirse en un activo “zombi”: bien ubicado, pero vacío y sin generar ingresos.

Este fenómeno no es exclusivo de la #RepúblicaDominicana. En #Miami, #Madrid o #Panamá se repite el mismo patrón: lo que no se adapta, se queda atrás. La competencia ya no es solo la ubicación; ahora importan la #EficienciaEnergética, la #Sostenibilidad, la certificación ambiental, la tecnología integrada, el diseño, las amenidades, los estacionamientos y hasta la experiencia que transmite un lobby al entrar.

Cuando los inquilinos se van

Muchos propietarios lo han vivido de cerca. Un cliente que llevaba años en un edificio, de repente anuncia que se muda. No es un capricho: es la suma de detalles que marcan la diferencia. El parqueo que antes alcanzaba ya no es suficiente; el lobby, que en su momento impresionaba, hoy luce anticuado. Una infraestructura obsoleta, ascensores lentos, cableado limitado y un aire acondicionado ineficiente hacen perder atractivo.

Incluso la congestión de la zona influye: empresas que valoraban estar en ciertas áreas ahora prefieren polos más ágiles, con transporte público y estacionamientos más abundantes.

En #Piantini, un edificio perdió a su inquilino ancla y permaneció vacío hasta ser vendido a un #FondoDeInversión que lo reposicionó. En cambio, una torre en #Naco que decidió modernizar logró retener a sus multinacionales sin bajar tarifas.

Decidir si invertir o vender

Llegado este punto, el propietario enfrenta un dilema: ¿invierto en el inmueble para volver a competir o lo vendo antes de que pierda más valor? La respuesta depende del ciclo en que esté el mercado.

En fases de expansión, como vive hoy Santo Domingo, los edificios nuevos con certificaciones verdes son la primera opción y los antiguos solo sobreviven si se modernizan. En fases de maduración, los inmuebles con más años deben competir con precio o remodelaciones. Y en fases de ajuste, cuando suben las vacancias, las oficinas Clase B y C se vuelven atractivas precisamente por su menor costo. Saber leer en qué ciclo está tu ciudad es clave para decidir.

El “botox” inmobiliario

Para ilustrarlo, pensemos en una comparación ligera. Los inmuebles, al igual que las personas, pasan por etapas. Una mujer a los 25 años le basta con la frescura natural llena de colágeno y juventud; pero al llegar a los 50, toca invertir en mantenerse vigente: alimentación saludable, ejercicios de pesas, suplementación y las ayudas dermatológicas.

Un “botox” en el lobby, unas horas extra de “gimnasio” en eficiencia energética o incluso un cambio de “look” reposicionando el edificio en otro segmento. Lo que no se renueva, envejece. Lo que invierte en su imagen, sigue atrayendo miradas… y contratos que generan atractivos #CapRates.

Estrategias que sí funcionan

Algunos propietarios logran retener inquilinos clave con inversiones selectivas: remodelan fachadas, negocian parqueos en terrenos cercanos, modernizan sistemas de climatización o agregan áreas comunes como cafeterías, rooftops o gimnasios.

Otros deciden reposicionar el activo: oficinas convertidas en consultorios médicos, locales en strip malls de conveniencia, apartamentos o naves industriales en hubs de #Logística y #LastMile.

Y están quienes convierten la vacancia en oportunidad ofreciendo espacios listos tipo #PlugAndPlay, coworkings o divisiones para startups y BPOs medianos.

Pero también hay que saber reconocer cuándo vender. Si el costo de modernizar supera la rentabilidad futura, puede ser más rentable salir del activo. En el mercado dominicano hay #FondosDeInversiónInmobiliaria que buscan precisamente propiedades con potencial de renovación.

El rol del asesor inmobiliario

En todo este proceso, el #AsesorInmobiliario especializado es más que un intermediario: diagnostica por qué se fue un inquilino, compara métricas con competidores, diseña planes de reposicionamiento viables y conecta con arquitectos, ingenieros y fondos #ValueAdd.

Conclusión

Un edificio que ayer fue Clase A y hoy es Clase B no es un fracaso: es una oportunidad. Con inversión inteligente, reposicionamiento estratégico o una venta en el momento adecuado, un inmueble envejecido puede volver a ser competitivo y rentable.

En un mercado tan dinámico como el dominicano, los propietarios que reaccionan a tiempo son los que logran transformar lo viejo en nuevo otra vez.

Este sitio web utiliza cookies para garantizar que obtenga la mejor experiencia en nuestro sitio web. Al hacer clic en Aceptar todo, acepta nuestro uso de cookies. Cookie Policy